En entradas anteriores hemos hablado de cómo las empresas han tenido que reinventar las funciones de sus puestos según las exigencias del mercado y de acuerdo a las necesidades actuales de funcionamiento; pero, hasta ahora, hemos dejado de lado un tema muy importante referente a la cobertura de ciertas vacantes: la adaptación al perfil de los candidatos.
En mayor o menor medida, las compañías suelen buscar candidatos que, además de tener las aptitudes necesarias, cumplan con cierto perfil de personalidad, vestimenta y actitud; pero los tiempos cambian, y hoy en día existen ciertas funciones que son desarrolladas por jóvenes (mayormente) de un perfil menos estricto. Ante este tipo de situaciones, la mejor respuesta que puede tener la empresa es, como siempre, la adaptación.
Un buen ejemplo de estos casos es el perfil regular de los Community Managers, quienes -casi por naturaleza- están acostumbrados a trabajar desde su casa, en pantuflas, frente a la computadora. Exigir a un Community Manager habilidades personales de interacción presencial o códigos de vestimenta estrictos reduciría en gran medida el campo de búsqueda de una empresa, sobre todo si tomamos en cuenta que el Marketing Digital es una adaptación de la mercadotecnia a los tiempos que vivimos, y nadie conoce mejor las redes sociales que quienes navegan en ellas la mayor parte del día.
La adaptación es una realidad que nos concierne a todos. El desarrollo tecnológico avanza a un ritmo acelerado y vivimos un tiempo en el que las nuevas tendencias comunicacionales cambian cada segundo. Si una empresa quiere mantener sus productos en el top of mind de los consumidores, no puede quedarse atrás, por eso tampoco puede darse el lujo de exigir mucho más que las mejores habilidades.
La transformación de las corporaciones y sus componentes va de la mano con la del hombre y sus habilidades. La evolución sigue su curso, y parece que el ramo laboral toma un rumbo hacia espacios más abiertos para la autenticidad y el libre desempeño, sin descuidar la eficiencia de los resultados. Como ejemplo tenemos grandes compañías, como Google, que están cambiando radicalmente los métodos de trabajo. Seguramente la dinámica laboral en México no tarda en adaptarse al nuevo mundo corporativo, ¡estemos atentos!
¡Hasta la próxima!
Tony.
コメント